25 mayo, 2017

Todo pasa y todo llega

Sí, va por ti. Por imaginar que, algún día, la tormenta pasará. Por intentar vivir cada día arrastrando el sufrimiento, y ocultando el dolor para no aparentar debilidad. Por sentir vergüenza y odio cuando lloras. Por intentar buscar las respuestas a los porqués de tus pensamientos. Por sentirte vulnerable, herido y engañado.
Sólo piensa que el tiempo utilizado en reparar tus heridas, esta bien hecho. Sólo piensa que llegará el día que te hará sentirte liberado, sin malas hierbas que atenacen tu corazón, y con la esperanza de una vida mejor en tu alma.
No es fácil, pero si superable. Confía en aquellos que te quieren, que te admiran, que te siguen sin dilación y que te entienden, comprenden y respetan.
Aprende a combatir los pasos retrocedidos. Asume las enseñanzas de la vida y plántate con fuerza ante la adversidad.
Destierra de tu mente aquello que te daña, poco a poco, sin presiones ni prisas. El arco iris espera salir cuando tú se lo indiques. Cuando quieras deslumbrarte con sus colores hasta cegarte. Cuando la opresión de tu pecho salga liberada sin arrastrar cadenas imaginarias. Todo llegará, mientras tanto, vive absorbiendo pequeñas bocanadas de sonrisas. Aquellas que te lleguen hasta lo más hondo de tu ser. Disfruta de todo aquello que te resulte placentero. Déjate arrastrar por las sensaciones que te hacen sentirte vivo y respira tranquilo pensando que el final del túnel, cada vez está más cerca.